Ha sido un extraño aniversario de boda. Lo hemos celebrado hoy (en realidad ayer sábado), aunque el día oficial pasó hace unos días.
Por la mañana asistimos al bautizo del hijo de mi prima D. Mis primas, D y M,en realidad no son primas mías sino de mi madre, pero siempre las he considerado familia muy cercana, de hecho son personas a las que quiero y aprecio mucho. Aunque siento no decir lo mismo de algunos de sus novios/maridos y del resto de la familia de mi madre.
p se portó de maravilla, estuvo muy interesada por toda la liturgia, sobre todo en la parte del agua sobre la cabeza del bebé y creo que ha aparecido en todas las fotos.
P y yo, haciendo gala de la insociabilidad que me atribuye esta rama de la familia, desaparecimos rápidamente tras la ceremonia para disfrutar del resto del día juntos (p se quedó con su abuela). Dentro de unos días será el cumpleaños de P, así que aprovechamos para ir a comprar uno de sus regalos: una cafetera express con dispositivo para capuchinos. Ya no tengo excusa para no tomar café por las mañanas
Por la noche fuimos a cenar a uno de nuestros sitios favoritos y he pagado la cena más cara de toda mi vida. Espero que el año que viene pueda pagar una todavía más cara. Aunque tal como está el trabajo, no se, no se...
En el trabajo, estoy pasando también una época extraña. Hay crisis en el sector, pero tengo más trabajo que nunca. A ello influye el que S, mi compañero (y pese a ello, uno de mis mejores amigos), se haya casado hace unos días y haya enlazado su permiso por boda con su mes de vacaciones, con lo que estaré sin verle hasta mediados de octubre. En el trabajo solemos apoyarnos mutuamente en los momentos difíciles y desde que se ha ido, parece que todo va de mal en peor. Le echo de menos!!
El trabajo influye en mi vida, pero trato de evitarlo. Realmente, los problemas laborales han influido siempre en mi vida. Han definido mi estado de ánimo y han llegado a provocarme auténticos problemas. Ahora me gusta creer que he madurado y que sé separar mi vida profesional de la personal. Puede que no lo consiga siempre, pero lo intentó, así que todos los días, cuando termino mi jornada laboral, trato de no pensar en ella hasta el día siguiente, y haciendo eso, los fines de semana son maravillosos.
Ya cinco años, eso deben ser las bodas de cartón, o algo así. Ya hace cinco años que estamos casados, y han pasado en un suspiro. P y yo hemos hablado durante la cena como hacía mucho tiempo que no lo hacíamos, e inevitablemente, hemos hablado de otro aniversario bastante más luctuoso. ¿Dónde estabais vosotros el 11/09/2001? Nosotros estábamos camino de Turquía, con una extraña sensación a caballo entre el miedo y la incredulidad. No creo que olvide nunca aquel día.
domingo, septiembre 12, 2004
Publicado por Poncho a las 01:40