He recibido un mail de un redactor de televisión invitándome a participar la próxima semana en un programa en el que tratarán el tema de los hipocondríacos, "con la participación de un psicologo que me podrá ayudar"
Nunca pensé que necesitara ayuda con esto. De hecho, creo que la hipocondría es una parte importante de mi carácter. ¿Cómo sería yo, si me eliminaran partes de mi carácter? ¿Cómo sería mi vida, si tuviese sentido de la orientación, o autodisciplina, o no fuese hipocondríaco? ¿Cómo sería, si no me emocionara al leer algo hermoso, no tuviese facilidad para los idiomas, o no resultara tan mordaz cuando me siento incómodo?
Seguiría siendo yo mismo, pero diferente...
Da un poco de miedo que los psiquiatras puedan "arreglarte" convirtiéndote en otra persona.
Siempre me pregunté de dónde sacaban los programas de televisión a sus invitados, ya había encontrado una explicación, pero esto añade una nueva dimensión al asunto. Supongo que habrán dado con El Jardín buscando en Google algo parecido a personalidades borderline en España. En definitiva, hoy en día, en televisión puede salir cualquiera.
Aunque me resultaba tentador asistir al programa, he dicho que no. Una vez más, Poncho no disfrutará de sus quince minutos, pero ahora estoy convencido de que voy por el camino correcto hacia la gloria del famoseo. Temblad Kiko y Aída.
PS: Mientras escribo este post, p ha venido y me ha puesto en la cabeza su corona de princesa. Doy gracias de que no pueda verme nadie.
sábado, mayo 29, 2004
Publicado por Poncho a las 11:56